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Las tecnologías se convierten en un gran avance para el negocio de bordado de las mujeres arroyanas

Circular FAB significa una nueva forma de hacer las cosas, una corriente alternativa para unir a personas con intereses comunes y seguir creciendo. Se trata, en definitiva, de innovación social, un concepto que está contribuyendo a que las sociedades de muchos rincones rurales puedan avanzar en distintas partes del mundo.
De esta manera, las mujeres de los pueblos, que antaño se reunían con medios rudimentarios para elaborar muchos de los productos que se creaban a nivel local, se han unido ahora en este espacio con tecnologías innovadoras que facilitan la labor de su actividad.
En este caso hablamos de la asociación de Mujeres Arroyanas y otras artesanas del municipio, que han asistido a la formación sobre bordado con una máquina y remalladora digital en el Circular FAB. Para conocer de primera mano sus impresiones, las protagonistas explicaron los beneficios técnicos así: “Cuando nos dedicamos a una actividad de forma profesional, cualquier herramienta que nos ahorre tiempo y optimice nuestro trabajo es de gran ayuda, y disponer de una máquina de coser que permite bordar desde un archivo digital puede llevar nuestro negocio a un nuevo nivel”.

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Impulso a negocios locales y reutilización de recursos en el Circular FAB de Arroyo de la Luz

Las estrategias para el fomento de la economía local y la implementación de tecnologías en las empresas son los retos a los que se enfrentan las comunidades rurales de hoy en día. Para sobrevivir a este contexto de transición económica y desafío demográfico y producir los cambios necesarios en el tejido empresarial la disponibilidad de recursos como la Red Circular FAB
es clave.
Una de las historias que aúna ese ánimo por descubrir las oportunidades que las tecnologías aportan a los negocios ha tenido lugar en el Centro de Arroyo de la Luz. Su protagonista es Estíbaliz, una artesana del vidrio con un interesante proyecto basado en el reciclaje de telas y cristales desechados que, a través de un proceso creativo y singular, se transforman en bisutería y utensilios para el hogar.
Estíbaliz forma ya parte de las personas que comparten la filosofía Circular FAB, cuando hace unos días se acercó a este espacio con el propósito de descubrir el funcionamiento de la cortadora láser y ver las posibilidades que esta tecnología puede ofrecer a su negocio. A través de este recurso técnico realizó impresiones de dibujo sobre distintos materiales y mezclas de vidrio.

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El papel de la tecnología para la supervivencia de negocios tradicionales

Las máquinas llegaron para quedarse pero desde su invención la mente humana no ha parado de crear, desarrollar y mejorar sus posibilidades. Por ello, desde el chip de un móvil al sistema de una lavadora, la obsolescencia de los componentes que integran cualquier mecanismo es una constante presente
desde los inicios de la industria hasta nuestros días.
Por esa razón, y enmarcados en la economía circular, los Circular FAB son un recurso para revitalizar la vida de los negocios y exprimir al máximo las posibilidades de las personas que hacen uso de sus espacios. Así es como surgió la oportunidad para uno de sus usuarios, Ildefonso. Él cuenta con un taller en la localidad y se había encontrado en la imposibilidad de llevar a cabo su actividad debido a que el nuevo modelo en el mercado para una de sus máquinas no era compatible con las baterías que disponía. Para solucionarlo, realizó la impresión en 3D de una pieza que le permite aprovechar las baterías de sus antiguas herramientas en las nuevas de otra marca. Esta pequeña impresión le ahorró tener que invertir en la adquisición de nuevas baterías y evitó que las antiguas terminaran en el vertedero.

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